Una buena noche de sueño puede hacer maravillas para nuestra concentración, salud y resistencia física; pero ¿sabía que el sueño también desempeña un papel crucial en su salud mental? Dormir mal no solo es un síntoma de mala salud mental, sino también una causa.
Cuando se trata de dormir mientras se sufre una enfermedad mental, muchas personas informan que no se trata de un acto de restauración. A menudo terminan sintiéndose cansados debido a problemas de sueño que surgen durante la noche. Las personas que padecen una enfermedad mental generalmente pasan más tiempo en una etapa de sueño más liviana y menos tiempo en las etapas REM de sueño. La falta de sueño, a su vez, hace que sea más difícil para las personas hacer frente a su enfermedad mental.
El sueño REM es el período de tiempo en que la temperatura de nuestro cuerpo, la presión arterial, la frecuencia cardíaca y la respiración aumentan a un estado medible para aquellas personas que están despiertas. Cuando este sueño reparador se interrumpe, causa estragos en el cerebro y afecta los niveles de neurotransmisores y hormonas del estrés. Cuando su cuerpo sufre de un horario de sueño semejante, amplifica los síntomas de otros diagnósticos psiquiátricos.
Los estudios muestran que entre el 65% y el 90% de las personas que sufren de depresión también experimentan algún tipo de problema de sueño. Por otro lado, los problemas del sueño también aumentan el riesgo de desarrollar depresión. Además de eso, los pacientes afectados por problemas de sueño tienen menos probabilidades de responder al tratamiento. Los problemas del sueño también afectan a más del 50% de los pacientes con trastorno de ansiedad generalizada. En el caso del trastorno bipolar, los estudios muestran que entre el 65% y el 99% de los individuos afectados reportan una disminución en la necesidad de dormir durante los episodios maníacos. Si bien los efectos del sueño en las personas que padecen enfermedades mentales difieren caso por caso, la superposición entre los dos temas es difícil de ignorar.
Entonces, ¿cómo pueden los que sufren ayudarse a sí mismos a recuperar ese sueño reparador? Aparte del tratamiento, las personas pueden implementar algunos cambios en el estilo de vida para mejorar su horario de sueño.
- Disminuye los niveles de cafeína, nicotina y alcohol.
- Participar en la actividad física regular.
- Mantener un horario regular para dormir y despertar
- Deshazte del dormitorio de la electrónica.
- Mantén tu dormitorio oscuro
- Meditación y otras técnicas de relajación.
Si está buscando mejorar sus arreglos para dormir, comience con su colchón. La fábrica de mejores colchones tiene como objetivo equipar a cada individuo con el colchón adecuado para beneficiar su nivel de sueño.
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